Presta atención a los siguientes factores que forman parte de tu personalidad y que están directamente relacionados con tu estilo y la imagen que reflejas a las demás personas:
- Grado en que buscas establecer contacto con otras personas porque encuentras satisfactorio y gratificante el relacionarte con ellas. La disposición hacia el afecto, el cariño, la expresividad de sentimientos y el contacto social.
- Tu estabilidad emocional y la manera como te adaptas al ambiente que te rodea. La tolerancia a la frustración y qué tanto te dejas afectar por tus sentimientos.
- Si tiendes a ser dominante o sumisa, competitiva, asertiva, segura de ti misma o por el contrario conformista o pasiva.
- Tu nivel de entusiasmo, espontaneidad, expresividad y alegría.
- El seguimiento de reglas, principios, valores y el nivel de responsabilidad en tus actuaciones.
- Si eres tímida o cohibida (prefieres lo seguro, predecible y estable) o por el contrario eres más atrevida, segura y emprendedora en lo social y asumes riesgos.
- El grado de emotividad, sensibilidad y realismo a la hora de tomar decisiones.
- El nivel de confianza o no en los demás.
- Si eres práctica, realista, con los pies en la tierra o imaginativa e idealista.
- Si eres una persona abierta a los demás, natural y genuina o una persona discreta, calculadora y que le resulta difícil hablar de sí misma.
- El nivel de autoestima que tengas, la confianza, seguridad y la visión positiva o no de ti misma.
- La apertura al cambio y a experimentar nuevas situaciones.
- El grado de dependencia o autosuficiencia en la toma de decisiones.
- Si eres perfeccionista, organizada y disciplinada o flexible y tolerante con las faltas.
- Si eres una persona tranquila, relajada y paciente o si eres tensa, impaciente e intranquila.
- Si eres introvertida o extrovertida.
- Si muestras ansiedad (eres perturbable o imperturbable)
- Si eres una persona receptiva o no a las expresiones y opiniones de los demás.
- Si eres dependiente o independiente.
- Si eres desenfrenada o auto controlada.